Síguenos en nuestras redes

Internacionales

El antisemitismo mexicano

Desde hace muchos años, décadas incluso, se ha visto de manera regular un claro antisemitismo en la política y la sociedad mexicana. Desde bromas como llamar al restaurante VIPs que alguna vez tuvo una sucursal en un afluente barrio de Palmas, en el poniente de la Ciudad de México donde hay casas, comercios y consultorios médicos de judíos, «Tel AVIPS», hasta acciones concretas como el voto de México en 1975 a favor de la resolución 3379 de la Organización de las Naciones Unidas que definió al sionismo como una forma de racismo, y que le costó a este país un boicot turístico para lo cual el presidente Luis Echeverría tuvo que ofrecer en sacrificio a su canciller, Emilio O. Rabasa, como desagravio.

A lo largo de los años han habido altibajos en el antisemitismo, destacándose algunos momentos en el primer lustro de este siglo cuando comenzaron a aparecer suásticas nazis en algunos muros con lenguaje de odio. El antisemitismo epidérmico surgía bajo cualquier pretexto, como cuando el director de Conagua en el gobierno de Enrique Peña Nieto, David Korenfeld, abusó en el uso de un helicóptero oficial para fines privados, donde la crítica se extendió a ataques por ser judío.

En otro conflicto, el de la periodista Carmen Aristegui con su vieja empresa MVS, enmarcado en un tema de libertad de expresión, el debate pasó rápidamente a enfocarse en un conductor en la misma estación, Ezra Shabot, por el hecho de ser judío.

Desde hace años, dos intelectuales fundamentales para entender la política mexicana del último medio siglo, Enrique Krauze y Jorge G. Castañeda, sufrieron continuos embates por ser judíos. Krauze se ha convertido en un enemigo público central del presidente Andrés Manuel López Obrador, cuyos ataques sistemáticos llegaron a ser tan brutales, que la comunidad judía envió mensajes a Palacio Nacional para expresarle su preocupación por tan artero hostigamiento. Adela Micha, otra prominente figura de televisión y redes sociales, no han dejado de atacarla por su origen y llegarle a decir cosas tan espantosas como «te vamos a convertir en jabón». Y apenas en mayo pasado, López Obrador se refirió al publicista Carlos Alazraki, uno de sus más severos críticos, como un «conservador, incluso hitleriano».

El antisemitismo en México creció, como en el resto de los países de América Latina, tras el conflicto entre Israel y Hamás en 2021. Un estudio realizado por el Observatorio Web, que es una iniciativa del Congreso Judío Latinoamericano, la Delegación de Asociaciones Israelitas Argentinas y la Asociación Mutual Israelita Argentina, reveló que durante las dos primeras semanas de aquel enfrentamiento, los comentarios y publicaciones con contenido antisemita se duplicaron en Twitter y se incrementaron 38% en Facebook, donde ocho de cada 10 mensajes analizados hacían referencia al sionismo o a Israel.

Publicidad

En aquel conflicto, México expresó su consternación por lo que llamó «el acelerado deterioro» de la situación en Israel y pidió un cese inmediato de toda acción que pusiera en peligro la vida y la seguridad de la población civil, invitando a las dos partes a suspender hostilidades y dialogar para reducir la violencia. El gobierno de López Obrador caminó sobre terreno seguro y sin chocar política y diplomáticamente con el gobierno israelí ni con Hamás o las naciones que apoyan la organización terrorista. López Obrador quiso repetir la receta con el nuevo conflicto que estalló el 7 de octubre, pero las cosas no salieron como hace tres años.

«Nosotros no queremos la violencia», dijo el lunes de la semana pasada López Obrador. «Nosotros somos pacifistas. No queremos que pierda la vida ningún ser humano de ninguna nacionalidad, sean de Israel, sean palestinos. Queremos que se garantice el principal de los derechos humanos, que es el derecho a la vida». La posición mereció una fuerte respuesta del gobierno israelí a través de su embajada en México, que en un comunicado le exigió una posición más enérgica y que condenara «de manera contundente los actos barbáricos perpetrados por la organización terrorista Hamás».

En el fondo, las dos declaraciones son similares, pero el contexto modificó el sentido de las palabras. López Obrador se ha ido aliando con enemigos de Israel, como Venezuela, cuyo presidente Nicolás Maduro condenó a Israel y dejó sin censurar a Hamás. Maduro se ha acercado a Irán, que financia a Hamás, armando y entrenado a sus milicias, como también lo han hecho Cuba y Nicaragua, a quienes trata López Obrador con condescendencia, y que recientemente recibieron en sus capitales al presidente iraní, Ebrahim Raisi.

Junto con esas amistades, el presidente mexicano ha sido explícito en su respaldo al presidente ruso, Vladimir Putin, a quien no condenó por invadir Ucrania, y que le ha corrido la cortesía política de recibir delegaciones militares en dos eventos oficiales en México.

Las señales que ha enviado López Obrador a Israel no son de amistad, aunque no ha llegado al extremo del presidente de Colombia, Gustavo Petro, cuyas declaraciones lo pusieron en el umbral del rompimiento de relaciones con Israel. La cancillería mexicana condenó la mañana del 7 de octubre el ataque de Hamás a civiles, pero el mensaje en X (antes Twitter), fue borrado poco después. La mañana del domingo 8 la cancillería emitió un nuevo comunicado, tibio y general, que corrigió por la tarde con una condena inequívoca de los actos terroristas. Al día siguiente, López Obrador corrigió a su Cancillería y dijo que condenar no era lo importante.

Publicidad

López Obrador fue actuando sobre la marcha. No polemizó con la Embajada de Israel, y anunció que enviaría dos aviones militares para evacuar a los mexicanos que quisieran salir de Israel. La Fuerza Aérea no estaba preparada y tardó muchas horas en alistarlos. La Secretaría de Relaciones Exteriores tampoco, y la Embajada en Tel Aviv no sabía nada de lo que se estaba preparando. La primera evacuación fue fundamentalmente de turistas atrapados en el conflicto. Días después, ante la crítica de que no habia más evacuación y parecía haber sido más un ejercicio de propaganda que una acción de Estado, se organizó un puente aéreo entre Tel Aviv y Madrid, siendo el único país que evacuó a medias a sus connacionales.

Nuevas criticas surgieron por su silencio sobre dos mexicanos presuntamente secuestrados por Hamás el 7 de octubre, y hasta nueve días después el vocero presidencial -no López Obrador, que nunca se vincula con temas que pueden salir negativos para su imagen-, dijo que estaban buscando contactos con Hamás o con países que tuvieran relación con la organización para lograr su liberación.

Una vez más, llegaron tarde al abordaje del problema, que ha sido motivo de preocupación por una decena de países y posiciones muy enérgicas ante Hamás, como la cancillería argentina, que exigió la liberación de sus connacionales desde la semana pasada.

Los tropiezos del gobierno de López Obrador han ido acompañados por una batalla en las redes sociales donde las cuentas vinculadas a Palacio Nacional han mostrado su antisemitismo. Trágicamente, el lópezobradorismo no está solo. El expresidente Vicente Fox, del PAN, ha utilizado el racismo y el discurso de odio dentro de su cruzada electoral, acusado a la virtual candidata del partido en el poder a la Presidencia, Claudia Sheinbaum, de «judía búlgara». Sheinbaum, que es judía pero no es búlgara, mantiene una postura idéntica a la de López Obrador.

La historia se repite. Los ciclos racistas, antisemitas, fascistoides, nos persiguen como fantasmas. La inconsistente política de López Obrador no ayuda a neutralizar ni a encontrar lenguajes moderados. El extremismo del México actual, hoy se expresa en la guerra de Israel y Hamás, que en algún momento, esperamos, acabe sin que escale a conflicto regional. Lo que no se irá, lamentablemente, es nuestro discurso de odio que cada día crece más.

Publicidad
Seguir Leyendo
Publicidad
Click para comentar

Leave a Reply

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *

Internacionales

Hombre de 81 años fallece tras caerse de una camilla durante traslado médico

Jorge Eduardo Hernández, de 81 años, falleció después de caerse de una camilla y golpearse la cabeza mientras era trasladado a su casa en Bahía Blanca, Argentina.

 

DETALLES DEL INCIDENTE

El hombre estaba siendo llevado de regreso a su hogar en una camilla después de recibir tratamiento en un hospital por insuficiencia renal.

El trágico incidente quedó registrado en video por una cámara de seguridad de un vecino, mostrando cómo el personal médico intentaba ingresar a la casa con la camilla cuando esta se volteó, causando la caída de Jorge Eduardo y su posterior fallecimiento.

Publicidad

 

 

 

Publicidad

INVESTIGACIÓN Y REPERCUSIONES LEGALES

El fiscal Cristian Aguilar está investigando el incidente como un posible homicidio culposo.

Se presume que la falta de sujeción del hombre a la camilla contribuyó a su caída.

Los videos del incidente se presentaron como pruebas, y se espera una resolución en los próximos días.

Además, se realizó una autopsia para determinar la causa exacta de la muerte de Jorge Eduardo.

Publicidad
Seguir Leyendo

Internacionales

Youtuber sobrevive a brutal caída en parapente desde 26 metros

El conocido youtuber Anthony Vella sobrevivió milagrosamente a una caída desde un parapente motorizado, que ocurrió desde una altura de 26 metros mientras volaba a una velocidad de 80 kilómetros por hora en Texas, Estados Unidos.

El impactante incidente dejó a Vella con graves lesiones en diversas partes de su cuerpo, incluyendo el cuello, la espalda, la pelvis y un brazo.

RESPUESTA DE EMERGENCIA Y HOSPITALIZACIÓN:

Tras el desplome, Vella logró llamar al número de emergencias 911 y fue rápidamente trasladado a un hospital, donde fue sometido a una intervención quirúrgica debido a las múltiples fracturas sufridas.

El youtuber compartió detalles sobre el accidente en un video publicado desde su cama de hospital, mostrando imágenes del incidente y explicando cómo ocurrió.

Publicidad

DETERMINACIÓN Y FUTURO:

A pesar de la gravedad de sus lesiones, Anthony Vella expresó su determinación de regresar a volar, demostrando su pasión por esta actividad a pesar del riesgo evidente.

El incidente sirvió como recordatorio sobre los peligros asociados con las actividades extremas y el papel de la responsabilidad en la búsqueda de la popularidad en las redes sociales.

Publicidad
Seguir Leyendo

Internacionales

¡Viral! Pescado come sopa y arroz en cuchara y sorprende a las redes

La historia de un pescado alimentado con sopa y arroz en una cuchara se convirtió en un fenómeno viral en las redes sociales, generando una amplia variedad de reacciones por parte de los usuarios.

La peculiaridad de ver a un pez consumiendo este tipo de alimentos y respondiendo al llamado de los humanos capturó la atención de miles de internautas en todo el mundo.

 

‘FLIPPER’, LA MASCOTA ACUÁTICA DE SANTA MARTA:

El video viral fue compartido en la cuenta de @ColombiaOscura, donde se reveló que el pescado, apodado ‘Flipper’, es la mascota de una familia en Santa Marta, Colombia, y reside en una pileta de agua.

En el video, se muestra cómo ‘Flipper’ abre la boca para que le den de comer la sopa con arroz en una cuchara, mientras también permite ser acariciado por la mujer que lo cuida.

Publicidad
@resumida.0223pescado que toma sopa en cuchara su nombre es fliper

♬ sonido original – vida resumida

REACCIONES EN LAS REDES SOCIALES:

La difusión del video provocó una rápida propagación del contenido, generando más de 357 mil reproducciones y cientos de comentarios en la plataforma.

La situación inusual y sorprendente de ver a un pez actuando de esta manera despertó la curiosidad y el asombro de los usuarios en las redes sociales, convirtiendo a ‘Flipper’ en todo un fenómeno en línea.

Publicidad
Seguir Leyendo

Trámite de Visas en Xalapa

Trámites de visas en Veracruz y Xalapa

Más noticias

Trending

Copyright © 2023 Grupo Es Noticia S.A. de C.V.