Las y los candidatos de oposición señalan a Morena por condicionar el agua potable a cambio de votos en la Ciudad de México (CDMX).

Candidatos del PAN, PRI y PRD a las alcaldías denunciaron que funcionarios y militantes de Morena condicionan el acceso al agua potable con fines electorales en diversas zonas de la capital del pais.

Gerardo Quijano, candidato a la alcaldía Magdalena Contreras, acusó que operadores del Sistema de Aguas de la Ciudad de México condicionan el suministro del agua, ya que exigen que se bajen las lonas, en caso de que sean en favor de Santiago Taboada, si quieren recibir agua a través de pipas en la demarcación.

En tanto, Mauricio Tabe, aspirante a la alcaldía Miguel Hidalgo, denunció una “campaña de mentiras” por parte del gobierno de la ciudad que cierra las llaves del agua a las colonias y acusa como responsable a la demarcación, por lo que exigió no jugar con los derechos de los vecinos.

Señalan a Morena por condicionar el agua potable a cambio de votos

La abanderada a la alcaldía Tlalpan, Alfa González, también denunció que el gobierno de la Ciudad de México hace un uso político y faccioso del reparto de pipas de agua; “cierran la llave del agua y le dicen a la gente que la alcaldía es la responsable de quitar el líquido, con esta acción buscan generar enojo en los ciudadanos”.

Por su parte, Jorge Alvarado, candidato a la alcaldía Milpa Alta, afirmó que el gobierno capitalino condiciona en esta zona el reparto de agua pidiendo credenciales de elector, aún cuando, señaló, hay partes de esta demarcación que se consideran en pobreza extrema.

Repartición con fines políticos electorales

En su oportunidad, Margarita Saldaña, candidata a la alcaldía Azcapotzalco, también señaló que en la demarcación se reparte el agua potable con fines político electorales.

Por ello, la candidata manifestó la necesidad de tomar medidas para mostrar su descontento contra el atentado que la oposición acusa por parte del gobierno de la Ciudad de México.

En medio de la crisis hídrica que se vive en la CDMX, las y los candidatos de oposición señalan a Morena por condicionar el agua potable a cambio de votos.

Un grupo de 250 intelectuales liderados por el filósofo Roger Bartra, aseguró que las elecciones presidenciales del próximo 2 de junio, será una confrontación entre la democracia y el autoritarismo, por lo que solicitó a los mexicanos votar por Xóchitl Gálvez.

Los filósofos, escritores y académicos, realizaron un manifiesto en al vieja Escuela de Ingenieros en el Centro Histórico de la Ciudad de México, en el que señalaron los peligros de continuar con el régimen implantado por Morena.

Otros intelectuales destacados del grupo son el historiador Enrique Krauze, el comunicaros Héctor Aguilar Camín y el ex canciller mexicano, Jorge Castañeda, entre los más reconocidos.

“El grupo tiene diferentes puntos de vista políticos e ideológicos, pero todo se suma debido a que el Presidente López Obrador y su partido pretenden extender la deriva autoritaria del presente sexenio, lo que significa una grave amenaza para la democracia”, aseguró Roger Bartra.

Xóchitl Gálvez agradeció a los intelectuales el darse cuenta que de llegar a la Presidencia la oficialista Claudia Sheinbaum, no habrá cambios que beneficien al país como ha ocurrido en los cinco años y medio de gobierno de López Obrador.

“Ustedes han entendido muy bien que la próxima elección es entre democracia y autoritarismos y basta ver el debate para haberlo entendido, no hay cambio de proyecto, no hay más que el Plan C y el Plan C significa tomar a la Corte, tomar al Congreso, tomar control de los organismos electorales como es el Tribunal Federal Electoral y minimizar al INE.

“Morena pretende sumirse como la encarnación del pueblo, esa construcción ideológica en la que solamente caben los que piensan como ellos. Por eso hoy este país está dividido y polarizado. Ellos instauraron un relato maniqueo y falaz en donde los que no aceptamos imposición ideológicamente somos traidores a la patria”, acusó Xóchitl Gálvez.

Marcelo Ebrard se ha convertido en las últimas semanas en un lugar común en todo el arco morenista. En la CDMX asesora a la campaña de Clara Brugada y busca impulsar a los candidatos morenistas en diversas alcaldías mientras que, en el plano de la elección presidencial, permanece cerca de Claudia Sheinbaum, a quien acompañó en la noche del pasado domingo, en el último debate.

Esa dualidad respecto a dos equipos que se recelan es registrada en el oficialismo como un contexto favorable para que el excanciller recale en la Secretaría de Gobernación si Morena se impone en la contienda del 2 de junio.

Ebrard se mueve bien en un vínculo que es tenso al interior del morenismo. Ayer lunes esto quedó por escrito: el matutino La Jornada, de estrecha sintonía con la campaña de Sheinbaum, publicó una columna en la que se advirtió que la elección de Brugada está complicada y que Morena puede llegar a perder hasta 10 alcaldías.

Cerca de Sheinbaum advierten además que Ebrard tiene relación con todo el arco de la oposición, lo cual facilitaría la interlocución en la búsqueda de acuerdos. Un rasgo del que, por ejemplo, Mario Delgado carece por los agravios mutuos de los últimos meses de campaña.

Ebrard en Segob además puede jugar un papel clave en la relación bilateral con Estados Unidos, especialmente si se considera que la migración seguirá siendo un asunto central, ya sea los demócratas logren su reelección o bien, llegue un gobierno republicano.

En el War Room de Morena aseguran que Ebrard podría tener un papel central en el nuevo gabinete a no ser que exista un veto fulminante por parte de Andrés Manuel López Obrador.

No se ha registrado demasiado, pero la relación del excanciller con el presidente no da muestras de haber superado la interna morenista de finales del año pasado, cuando Ebrard objetó fuertemente un procedimiento diseñado desde Palacio.

Ebrard, de hecho, en una entrevista la semana pasada, casi dio por descontado que López Obrador no tendrá injerencia alguna una vez que deje el poder. Son giros discursivos que no agradan en Palacio: hace dos meses Sheinbaum dijo algo similar a El Universal, hubo una queja desde el entorno presidencial y la candidata ya no volvió a hablar del futuro del actual mandatario.

El posible camino a Bucareli es disputado, porque además de Delgado. (cuyo papel en un eventual sexenio de Sheinbaum luce difuso), Zoé Robledo también quiere dejar el IMSS para ir a Segob y Luisa María Alcalde dice en privado que podría continuar en el cargo en el tramo inicial del posible gobierno de Sheinbaum.

¿Y la coordinación del Senado? Con el aval del Ejecutivo podría tenerla pero lo cierto es que Adán Augusto López Hernández ya tiene 15 futuros senadores morenistas que lo respaldarán para la coordinación.